FEREPA BIO BIO cuestiona decisiones medioambientales del Gobierno.

       Su preocupación y cuestionamiento por la forma en que las autoridades locales y nacionales se encuentran tomando decisiones en el área medioambiental manifestó el presidente de FEREPA BIO BIO, Hugo Arancibia Zamorano.

       Las resoluciones adoptadas por las autoridades locales en el caso de los dragados, en las bahías de San Vicente y Concepción; la construcción de la central termoeléctrica Bocamina, en Coronel; y el rechazo en el parlamento del proyecto de ley que prohíbe la pesca de arrastre, dejan en evidencia, señaló, que los parámetros y argumentos para decidir estos temas sólo apelan a razones laborales y económicas, pero no de carácter medioambiental. "Lo que suceda con el medio ambiente al parecer no es muy importante para las autoridades", agregó.

       En el caso del rechazo en la Comisión Pesca del proyecto de ley que prohíbe el arrastre, Arancibia manifestó su total disconformidad, pero aseguró que era un resultado completamente previsible. "El arte de arrastre no se prohibió por el análisis ambiental ni por el daño que pueda generar en la pesquería, sino por la cantidad de empleos que genera".

       Respecto de los dragados realizados en la zona, indicó que si no hubiese habido reclamo por parte de FEREPA BIO BIO hoy se estaría vertiendo arena en la zona exclusiva de la pesca artesanal, con todo el daño que eso pudo haber generado. A eso se agrega la presión ejercida por la autoridad a algunos de sus funcionarios, específicamente en el caso de la ex seremi de Economía, Rita Navarro, quien fue cesada en sus funciones luego de votar en contra de la zona de vertido del material dragado en el puerto de Lirquén.

         En el caso de la central termoeléctrica de Bocamina, en Coronel, señaló que la empresa se encuentra solicitando ampliación de concesión para poder vertir aguas sobre 23º a 540 metros de la costa, lo que podría generar la muerte de todas las especies que se encuentren a un kilómetro de diámetro. A modo de comparación, los emisario de Penco y Tomé superan los mil 500 metros de extensión, es decir, el de Coronel representaría un tercio de éstos. Por eso, desde ya anunció el voto en contra de FEREPA BIO BIO en el pronunciamiento requerido por la empresa a la Comisión Regional del Uso del Borde Costero, "porque creemos que se trata de una irracionalidad, un daño ecológico muy fuerte".       

          "Si no hay un cambio de actitud, si no se puede en un gobierno democrático discrepar (...) si no hay conciencia ambiental, si no le ponemos atajo al arrastre, si no somos capaces de tener autoridades serias que planifiquen en el futuro, la situación de la pesca artesanal para los próximos dos años es muy preocupante", concluyó.